Terminas tu educación obligatoria o decides estudiar de nuevo después de muchos años sin hacerlo y debes elegir qué carrera seguir. Algunos consejos para aquellos perdidos.
Elegir una carrera universitaria es un paso importante en la vida de una persona. Una decisión correcta permitirá que la persona pueda dedicarse a lo elegido con placer.
Una carrera universitaria nos dará la formación específica para prepararnos en aquello que queremos se transforme en nuestro oficio.
-Trata de imaginarte en el futuro, como herramienta para descubrir qué es lo que te gusta.
-Pregúntate qué es lo que más te gustaría hacer (juzgar, analizar, crear, administrar, vender, dirigir, construir) y en qué contextos (en una empresa, en una institución, en un medio de comunicación, en un juzgado, en un hospital, en un estudio, etc.).
-Pregúntate qué es lo que más te gustaría hacer (juzgar, analizar, crear, administrar, vender, dirigir, construir) y en qué contextos (en una empresa, en una institución, en un medio de comunicación, en un juzgado, en un hospital, en un estudio, etc.).
Es importante saber cómo es uno, qué es lo que le gusta. Por lo tanto, al elegir tu carrera, estás también eligiendo un estilo de vida. Y, por eso, es preferible que tengas en cuenta algunas cuestiones relativas a tu forma de ser:
Si no soportas estar en lugares cerrados por mucho tiempo, odiarías trabajar frente al monitor de un ordenador.. Hay cierto tipo de trabajos que obviamente tratarás de evitar, así como también cierto tipo de carreras relacionadas con esa práctica.
- Si no te gusta ayudar a la gente, hay un conjunto de carreras que debes descartar: medicina, psicología, asistencia social, terapia ocupacional, etc.
- Si sientes que hablar en público te da pánico, no elegirás una carrera que requiera estas aptitudes (como actor/docente/conferiante, etc.).
- Ponerse en contacto con varios profesionales que ejercen las carreras que uno ha detectado que le gustan, para preguntarles en qué consiste su quehacer cotidiano, suele ser un método útil para eliminar prejuicios y considerar nuevas alternativas. De esta forma, se logra conocer en profundidad, a través de la experiencia ajena, cómo es la profesión, cuáles son sus posibles salidas laborales, etc. Así, disminuimos las posibilidades de empezar una carrera que, a medida que se va conociendo, se va alejando cada vez más de nuestros preconceptos
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